lunes, 30 de diciembre de 2013

Ironman Cozumel 2013 (Tercera parte: The Race)

Cozumel, México, 1 de diciembre de 2103, 7:00 horas:

Right here, right now...

La gente empezó a gritar, la adrenalina subió, una corneta de aire medio rara inició lo que desde ahí parecía una ola gigante, metí mi cara al agua y empecé a nadar con todas mis fuerzas, me coloqué demasiado pegado a la playa, las cuerdas que delimitaban la zona de nado del hotel aparecieron frente a mi inmediatamente, comencé a nadar hacia mi derecha para colocarme en el pelotón principal, seguí nadando, no pasaron ni 5 minutos cuando los vi por primera vez, un grupo de peces justo debajo -no los peles, respira, mira al nadador que está frente a ti, sigue… Respira cada 3, si aguantas, un dos tres izquierda, un dos tres derecha, un dos tres-. Así continué por lo que pareció ser muy poco tiempo, de pronto veía una referencia frente a mi y no me costaba nada llegar a ella, dos o tres ciclos de brazada y ya estaba ahí, seguía en el grupo principal, de pronto mi ojos ven algo que no creen... Chankanab ya estaba ahí, ya me estaba colocando junto al muelle, ahora iba muy a la derecha, alejado de la playa, empecé a colocarme al centro del pelotón, la brazada muy estirada y la patada muy relajada... seguro nos llevan unos cuantos metros más para allá y nos hacen regresar, esto no puede ser todo... pues sí lo fue, al terminar el muelle del delfinario los atletas giraban a su izquierda dirigiéndose directamente a las escaleras, WOW había terminado, no necesitaba ver el reloj para saber lo que había sucedido, al no pensar en mi fobia la natación había sido superada con mi mejor tiempo hasta la fecha en aguas abiertas, menos de 1:30 mins/100mts.

Self Control...

Salí del agua, corrí por la transición, vi a Gaby y no me detuve como lo tenía planeado, este tiempo me daba pie a superar mis expectativas por mucho!!! No podía pararme a platicar, saludé y seguí adelante, tomé mi bolsa en la que solo había bronceador y glid para las rosaduras, no pelé el segundo ya que iba bien y el primero me lo empecé a colocar antes de entrar a la tienda de cambio, continué por la tienda junto con un gringo, éramos los únicos con prisa, It's a race!! gritábamos para que se quitaran... Aventé la bolsa con la gorra, googles, bronceador y glid a un montón de bolsas, salí corriendo y pasé mi mano por mi cara sin darme cuenta que todavía tenía bronceador!!! -mis ojos!!! que hiciste pedazo de idiota!!!- no veía nada, con una bolsa de agua traté de quitarme el bloqueador de los ojos mientras corría, seguía sin ver y ahora ardía!!! llegué a donde estaba Pancha, todas las bicis de mi rack seguían ahí!!! Era de los primeros WOW!!! -pues me vale cabrón, con todo y tus ojos jodidos sales en este momento!!!- Corrí y corrí hasta el punto donde por fin pude subirme a Pancha...

Ride the wind...

Debido a que los ojos me ardían no pude ponerme los lentes en la transición y rodé con ellos en la bolsa trasera los primeros kilómetros, sólo tenía el Gatorade del aero drink conmigo, estaba esperando a llegar la primer estación de abasto para agarrar agua, los ojos dolían, decidí ponerme los lentes de todas formas, el viento lastimaba mucho, tomé unos sorbos de Gatorade -servirá para limpiarte los ojos? no hagas otra pendejada, aguanta!!!- arranqué el primer gel del cuadro de Pancha y volteé por primera vez a ver mi reloj, 40 kph -bájale!!!- regulé mi velocidad a 35 kph hasta que llegué al primer puesto, agarré 2 ánforas de agua y una botella de Gatorade como pude sin bajar la velocidad, la verdad esos voluntarios se rifan. Con los ojos limpios y provisiones completas llegué a la parte "dura" de la isla, vientos de 22mph dijeron después, fue como chocar con un muro, de 35 el viento me detuvo hasta los 25 kph, me rehice y logré subir el ritmo hasta los 30, seguí y terminé la primer vuelta en menos del tiempo esperado!!!! Saliendo a la segunda vuelta logré subir a 40 otra vez!!! Menos tiempo y todavía tienes suficiente fuerza, es el momento de tirar la moneda: Cara te mantienes y guardas fuerza para el maratón, Cruz sales como alma que lleva el diablo, tomas ventaja del tiempo que tenías planeado, y vez si aguantas el maratón -chingue a su madre el mundo, dale duro, tan duro como puedas, sácale provecho a esta pinche bicicleta que te compraste, pero hazlo bien!!! Si te la vas a jugar es por que no haces 7 hrs, es por que haces 6 o menos!!! A DARLE CABRÓN!!!!- unos atletas a los que iba rebasando se sobresaltaron al oírme gritar esas palabras, jajajajaja pobres, pero se me pegaron y rodamos la sección libre de viento rebasando a todo el mundo, la adrenalina me invadía, Pancha rodaba suave y ligera, no hubo percances en los abastecimientos, la zona de viento volvió a golpear pero ya lo esperaba, me agaché me hice compacto y salí adelante, la tercera vuelta fue más fácil todavía y para cuando me encontré en la recta final rumbo al pueblo vi que si le metía un poco más iba a hacer mucho menos de las 6 hrs!!!!

A DARLE CABRÓN!!! Esta vez era un mexicano el que estaba cerca y me contestó pues a darle cabrón!!! Y cerramos como los grandes, rodamos arriba de 40 kph para lograr llegar en 5:45, la última vuelta para enfilar rumbo a la T2 estaba frente a mi, la di con cuidado, inmediatamente empecé a soltar el velcro de las zapatillas, saqué mis pies y di las últimas pedaleadas con los pies fuera de ellas, había llegado a la zona de transición, me bajé de Pancha Elvira y alguno de mis fans de Facebook, jajajajaja, me gritó, corre Pancho Elviro, corre!!!! Entregué a Pancha a un voluntario que con su mirada me indicó que él era el bueno, al entregarla grité gracias!!! Tanto a él como a ella, lo habíamos logrado, mi corcel y yo lo habíamos logrado!!!!

Angel on my shoulder…

Esta tienda de cambio la pasé como trueno, agarré mi bolsa y entre en la tienda, al entrar la bolsa me fue arrebatada por un voluntario muy profesional y serio que se fijaba en mis movimientos para ayudarme a hacer todo, saqué los calcetines y él sacó los tenis, los colocó frente al pie correspondiente y mientras yo me los colocaba sacó el otro bronceador, le dije que no lo necesitaba, lo aventó y me preguntó si me iba a llevar los lentes o los guardaba en la bolsa, le dije que se iban conmigo, acto seguido sacó mi Power Bar, mi gel GU y me los dio –coloca tu número en frente y ya vete!!!- me dijo.

Estos voluntarios están como paradas de pits pensé y salí tan rápido como pude para no decepcionarlo, yo creo que él pensaba que yo iba a ganar o algo así, no quise quedar mal y corrí como si todavía estuviera entero, no era así…

Hold on…

La isla golpeó duro por primera vez, había cometido el error de no comer nada sólido durante la última vuelta en la bicicleta. Al salir a correr el maratón vi a Gaby por segunda vez –si le metes un poco puedes hacer menos de 12 hrs!!!!- así que no paré, solo la saludé otra vez y giré a la derecha rumbo al circuito de 14 km que me esperaba para ser recorrido 3 veces…

Comencé a correr a buen ritmo unos metros -¿qué te pasa?- hambre era la respuesta, mucha hambre, en ese momento recordé el último gel y la barra de proteínas que estaban todavía en el cuadro de Pancha –shit!!!-. Saqué de mi bolsa trasera la barra que me dio el chico Ferrari de la T2, comencé a comer y, como decimos en México, no entraba, pues la forcé, mal hecho… Acto seguido empecé a vomitar, mi estómago y mi cuerpo estaban cerrados por la falta de alimento y el desgaste… System shut down…

De pronto caí en cuenta, tenía hambre y sed pero mi cuerpo rechazaba todo!!! Ni agua podía tomar. Así transcurrió la primer vuelta, tuve que caminar todo el tiempo esperando que mi cuerpo reaccionara, tratando de evitar a los servicios médicos para que no se dieran cuenta que estaba mareado y desorientado, no quería que en este punto una decisión médica me dejara fuera. Había llegado a la pared por un descuido mío y de nadie más!!!

With a spirit…

Mareado y desorientado, así me encontraba caminando de regreso al centro de San Miguel Cozumel, luchando con los demonios del 2013; cuando el cuerpo está vencido la mente tiene que salir adelante y así comenzó la lucha –un paso más… otro… trata de llegar a ese árbol, intenta tomar algo otra vez- Unos 3 km antes de llegar llegó el momento: El tiempo es negociable, la META NO.

Un pie se ponía frente al otro sucesivamente, un voluntario se me quedó viendo y me dijo: toma un trago de Pepsi, anda!!! Lo hice y fue el momento que estaba esperando, mi cuerpo lo recibió y agradeció, ahora agua, bien, agarra el gel, eso es todo!!! Empieza a trotar, Yes!!! Sin darme cuenta iba corriendo con la gente gritando a mi lado, la primer vuelta iba a terminar, la sonrisa había vuelto a mi cara, ahora era cuestión de tratar de recuperar el tiempo perdido…

Volví a ver a Gaby al empezar mi segunda vuelta, pude mantener un paso constante, lento pero constante, mi cuerpo todavía me estaba recordando el error cometido, Alfredo pasó y me gritó algo que me sonó a regaño, apreté el paso un poco, seguí hasta llegar al kilómetro 22, donde pasé a la zona donde se encontraba la bolsa que entregué en la mañana con comida para esta etapa, una bolsa de papas saladas y unas galletas de chocolate fueron las encargadas de dar a mi estómago el combustible suficiente para regresar por segunda vez al centro del pueblo y salir por última vez, esta vez no vi a Gaby, pero vi a Ivonne que me preguntó cómo iba: Voy más de 3 hrs abajo del tiempo del año pasado!! Le grité… En ese punto tenía muy claro que ya nada me detendría, así que salí a la última vuelta feliz, agradeciendo a la gente que aplaudía y a cada voluntario que me encontré, una adrenalina muy especial se iba produciendo, no fueron menos de 12 horas como me lo propuse al salir a correr el maratón pero que demonios!!! Mi objetivo eran 14 horas e iba a acabar en menos de 13!!!!

Safe & Sound…


Fiel a mi estrategia del año anterior la última vuelta la realicé platicando con un gringo, esta vez Vasilis fue sustituido por David de California, a un paso lento pero seguro nos dirigimos por última vez de regreso al centro de Cozumel, donde la meta nos esperaba, poco a poco mi paso iba subiendo por la emoción, David no pudo seguirme y se quedó, Good luck!! Fue lo último que escuché de él. Los últimos 2 km mi velocidad iba aumentando, toda la carga del 2013 iba cayendo en el camino, mi tía Lilia, mi divorcio, los sacrificios… todo fue saliendo de mi sistema en forma de llanto lo que me permitió llegar ligero a los últimos metros antes de dar la vuelta, miré al cielo y grité algo, no sé qué, di la vuelta y ahí estaba la meta con un reloj que todavía no marcaba las 13 horas, corrí mientras la gente gritaba, Gaby trató de darme la bandera de México que teníamos preparada para mi llegada, pero yo me había liberado de todo e iba muy ligero para cargar algo más, quería terminar así, le agradecí y seguí corriendo mientras el animador gritaba que yo ya era un IRONMAN!!!!

viernes, 27 de diciembre de 2013

Ironman Cozumel 2013 (Segunda parte: Race day)

1 de diciembre de 2013 4:00 hrs:

Losing my religion...

Llevo rato despierto, pasé la noche en vela pensando en la noticia que me llegó a través de Luis, un compañero en este año, la natación fue recortada y modificada para que sea corriente a favor dijo... Toda la noche acudían a mi imágenes del año anterior, terrible pensé, si el año pasado estuvo como estuvo y no modificaron es por que este año está peor!!!

Si les falló y la corriente cambia?!!!! No serán 3 km con corriente a favor, será en contra!!!! No, no, no por favor. No llegué hasta este punto para ni siquiera salir del agua, no por favor. Las imágenes de la lavadora en la que se convirtió el mar el año anterior seguían apareciendo en los cortos lapsos que pude cerrar los ojos...

Revisé todo con cuidado: Casco, zapatillas, número, nutrición, lentes, gorra, googles, etc. Salí del cuarto con la misma cara de zombie que trae un triatleta que llega a un Ironman (es la cosa con esta prueba, nunca sabes que esperar y las horas previas son pura adrenalina), en el restaurante tomé algo para desayunar, no sé qué, no lo recuerdo, seguramente un plátano y algunos carbohidratos para iniciar la competencia, salí y me uní al resto en el primer camión que salió rumbo a T1. Ahí encontré caras conocidas que lo primero que me dijeron: Te ves muerto de miedo!!! Chale se me nota demasiado pensé.

Pancha Elvira estaba ahí, donde la dejé el día anterior, mojada y lista, me puse a limpiarla con mi sudadera -demonios! debí traer un trapo- proseguí con los preparativos, coloca el aero drink, pega los geles y las barras en orden, coloca las gomitas en su lugar -te la estás jugando mucho Oscar, si haces más de 7 hrs en la bici no traerás nutrición suficiente, demonios!!!-.

Una vez terminado todo me dirigí hacia el rack donde estaba Alfredo, el único de mis compañeros que ubicaba dentro de la T1, por alguna razón se me olvidó ver donde habían quedado Luis y otros conocidos. Al llegar ahí, con él estaban otros competidores amigos suyos y estuvimos bromeando y discutiendo como el día estaba tranquilo y que el cambio en la natación había sido una exageración, ahora no sería un Iron, sería un engendro raro...

Salí con Alfredo a dejar las bolsas con la nutrición especial que nos sería entregada durante la bici y la carrera, nos tomamos un par de fotos y nos despedimos, a él lo iban a llevar al punto de salida en una motoneta y yo tomaría el camión de la organización para llegar al Hotel Presidente, no lo volvería a ver hasta el maratón.

Mr. Brightside...

El momento había llegado, en el camión sentado junto a un canadiense me di tres cachetadas: A ver cabrón, estarás mal entrenado, pero lo único para lo que te preparaste bien fue para esto, la natación. Déjate de mamadas y hazlo, SOLO HAZLO!!!

Tras tomar un Gatorade Prime y saludar a Luis, Mau y Rafa, me metí al agua, todo mundo estaba muy cauteloso y se quedaron en la playa a esperar la señal, yo no, me metí y me fui al frente. Nadé distraídamente hacia la línea de salida.


Ironman Cozumel 2013... (Primera Parte: El Previo)

Pues ha llegado el momento de reflexionar sobre lo sucedido en Cozumel el 1 de diciembre de 2013.

Tras un inicio abrupto de año -2012 fue un año difícil de superar- un Ironman no estaba por mucho en los planes... Regresar a una vida en la que uno se despierta y ya hay luz de día e irse a dormir ya muy entrada la noche era el objetivo para este año.

Pero bueno, la vida te da lo que necesitas no lo que quieres... Así que terminé regresando al deporte de resistencia (a.k.a. Endurance Sports), inicialmente el objetivo era este año realmente empezar a conocer el deporte desde abajo, ya tenía en mi haber la hazaña de estrenarme en el mundo del triatlón con un Ironman, ahora había que experimentar más dentro del deporte, otras distancias sobre todo, para ver que era lo que quería hacer, y es así como inició un año que se convirtió en un éxito total, no solo mantuve mi estabilidad laboral, me di el lujo de viajar, entrenar, conocer gente y acercarme a mi familia.

Al final este año iba a tener como objetivo el 70.3 de Cozumel (Medio Iron pa los cuates), pero volvemos a la vida, no más no te da lo que quieres si no lo que puedes manejar, y por que no el destino en la forma de falta de vuelos para Cozumel o Cancún en esas fechas me mandó un mensaje claro... Te chingas otra vez y si ya lo hiciste una vez lo haces dos, tres y las que sean necesarias: Si te vas a Cozumel... pero para el 1 de diciembre so... empieza a entrenar duro que no va a ser Medio va a ser Full!!!

Flesh & Blood (Sacifice)...

Tras varios baches en el camino: un entrenamiento en el cual no creía, cambios de gimnasio esperando un centro de entrenamiento que nunca llegó, muchas horas de entrenamiento en solitario (esa es la cosa con los triatletas, somos muy solitarios y hasta ahora lo entendí), gente con mala vibra esperando verme fracasar, etc etc etc...

Pues bien, empezaron a llegar las buenas: gente nueva con una actitud más parecida a la mía para enfrentar la vida y las competencias, Pancha Elvira Revolutions (que se ha convertido en mi ídola), horas y horas de entrenamiento en solitario pero con un enfoque diferente (ya no necesitaba un equipo a mi lado, conmigo basta y sobra), un club con una alberca olímpica preciosa, un gimnasio equipado con algo más que promesas que me ayudó a recuperar el tiempo perdido y entre otras cosas la más destacable: Este año no me enfrenté a mi más grande fobia, este año le pasé por encima, pero no por que fuera un chingón, simplemente por que fue algo que trabajé con tiempo y disciplina.

Don't stop believing...

Así fue como llegué al 29 de noviembre, me levanté y lo primero que pensé fue que este año no estaba ni remotamente tan preparado como el anterior, pasé la mañana convenciéndome de que la experiencia del año anterior tenía que valer de algo. Afortunadamente unos pendientes del trabajo me mantuvieron entretenido unas horas, otras cuantas las pasé rastreando la ubicación de Pancha Elvira, quien muy linda se reportó esperando en el hotel justo antes de despegar. El vuelo transcurrió sin contratiempos, unos cuantos videos y canciones para motivarme, silencio y meditación...

Another day in paradise....

Los dos primeros días en la Isla pasaron lentos, como buenos enemigos nos estuvimos midiendo, un clima hormonal que cambiaba a cada segundo, lluvia, sol, aire, arcoiris, lluvia torrencial, olas que llegaban hasta la otra acera del malecón, practicas de natación canceladas. Salí a correr el sábado, ese día antes del registro llevé a Pancha al otro lado de la isla para sentir el viento... dios esto va a estar del nabo... Charly, mi mecánico, me decía: Esto va a estar duro Oscarín, demonios!! pensaba yo...

¿Cómo vienes este año Vertti? parecía preguntar a cada segundo la isla, pues mal entrenado pero decidido era mi respuesta...


viernes, 18 de octubre de 2013

El Otro Vertti...

Un año está por cumplirse, ya 2 desde que decidí dar un giro a mi vida y con el objetivo de encontrar una versión mejorada de mí decidí hacer un reto que en noviembre de 2011 parecía imposible:

Nadar 3.8 km
Rodar 180 km
Correr 42.2 km

Y hacer esto en un mismo día, dentro de una competencia que en ese momento empezaba a ubicar como un Ironaman, y así dio inicio este reto personal que el 25 de noviembre de 2012 culminó con el final dramático en el cual yo crucé la meta del Ford Ironman Cozumel con el tobillo fisurado debido a una situación en la bici que me obligó a caminar el maratón con un pie izquierdo que empeoraba a cada paso... pero acabé.

De regreso de la isla la realidad me golpeó tan cruda como es, un pie inmovilizado por meses, depresión post competencia y un matrimonio moribundo era lo que me esperaba al bajar el avión, nada mal no?

Pero poco a poco fui recordando a una persona que conocí durante las 16 horas que duró mi travesía en el Ironman, un tipo que al parecer es capaz de lograr lo que se propone y que no se detiene, una máquina que avanza implacable hacia su objetivo con un impulso que no expresa muy a menudo pero que en ese momento exteriorizaba a cada paso, sin dejar ningún lugar a dudas, este cuate iba a terminar sin importar lo que pasara...

Pues bien este año la motivación es clara, quiero volver a ver a ese wey, por que ahorita está muy escondido en una zona de confort gris, así de claro lo exijo, sal de donde quiera que estés y ven a saludarme, que después de 35 años de vivir contigo esta es la faceta que más me gusta de ti y la que quiero dejar ver al mundo de ti, de mí...

viernes, 13 de septiembre de 2013

Ironman Cozumel 2012, Previo...

Este es el punto de partida, lo que hay que mejorar y por lo tanto lo que hay que analizar primero.

El entrenamiento previo a esta competencia fue de mucho volumen, horas y horas de entrenamiento, sobre todo en la alberca, eso tiene que cambiar un poco, menos alberca más carretera, que es lo que he hecho este año, lo que no he logrado dominar este año tanto como el pasado es la alimentación, no he sido tan cuidadoso y habrá que ver que resultados da eso.

Otra diferencia sustancial es que el año pasado no hice ni un sólo triatlón previo al Iron, este año llevo 3 triatlones cortos y un maratón, además de 3 medios maratones y un relevo en un medio Iron, esto por fuerza debe traer mejores resultados no?

Regresando al 25 de noviembre de 2012, ese fin de semana llegué dos días antes a la isla, con la presión de buscar mi bici, todo el relajo de la recolección hizo que tuviera un gran nivel de desconfianza en el servicio que la trasladó. Llegué al hotel y salí corriendo rumbo al centro de convenciones y tras verificar que los de Transport estaban en el lugar prometido me dirigí al registro, donde recogí mi paquete y marqué mi número de competidor en brazos y piernas, el 1547. En general pienso que la dinámica previa no puede ser mejorada más allá de la ubicación del hotel que es algo de lo que ya me ocupé.

La recolección de la bici no tuvo mayores contratiempos, una llanta ponchada que cambiamos ahí mismo y una pequeña vuelta por la costera dieron por finalizada la revisión previa de Pancha.

El registro de la bici en ZT puede ser más temprano sin tanto problema, e ir a nadar y rodar el sábado no es mala idea, cuidando no excederse, tratar de dar una vuelta completa a la isla no es factible.

Cuidar la alimentación el mes previo de la competencia es básico...



miércoles, 11 de septiembre de 2013

El amor en tiempos del triatlón...

Y aquí me encuentro hoy, revisando lo que ha pasado en mi vida los últimos años, digamos la serie de eventos fortuitos que me tienen donde estoy hoy.

¿Por qué estoy haciendo esto? Pues bueno, la respuesta es sencilla, mi idea es iniciar una bitácora que pueda ir revisando conforme pasa el tiempo para ver de lo que he hecho, que funciona y que no, que hay que mejorar que hay que mantener y así mejorar mis resultados en las distintas competencias que hago.

Antes de empezar a practicar este hermoso deporte mi vida llegó a un punto bajo, si bien no fue algo drástico y grave, de esas anécdotas que tienen otras personas de un incidente fuerte debido a la muerte de alguien, algún accidente ni nada parecido afortunadamente, al final del día fue un punto que me llevó a un grado de infelicidad e insatisfacción nunca antes visto en mi mundo.

Fue ahí cuando decidí cambiar mi rumbo, si bien hay cosas que valoro mucho de mi vida anterior, sobre todo amigos, había que hacer un cambio, ya no tenía nada en común con la gente en mi entorno y de pronto me encontré solo y sin ganas de acercarme a ellos.

Fue entonces cuando vi un video del Ironman de Hawaii, fue el documental de NBC sobre el campeonato 2010, vi las historias que ahí se contaban y pensé que yo también podía darle un cambio a mi vida, al final del día ya estaba nadando y mucha gente que entra a este deporte lo que más teme es la natación y yo ya lo traía dominado.

Fue así que empecé a entrenar para hacer el Ironman de Cozumel en 2012, dediqué todo mi tiempo extra a entrenarme física y mentalmente, nadaba mucho, hacía pesas, spinning, salía a correr varias veces por semana, veía videos, leía reportajes, libros y todo lo que se me cruzaba sobre el deporte. De pronto mi vida estaba de vuelta en camino, con una motivación y un enfoque claro.

Evidentemente todo empezó a mejorar en los demás aspectos de mi vida, si bien he tenido que pagar precios altos (amistades, fines de semana, entre otros), este deporte me ha devuelto mucho más.

Ahora una amistad se mide no por el número de pedas que te acomodas con una persona, si no por los kilómetros que comparten durante semanas o meses. El amor de tu vida ahora te despierta a las 5 am para salir juntos a rodar esos kilómetros marcados en Training Peaks. Un amigo es aquel que durante un maratón se planta a tu lado los últimos 8 km y no te deja bajar el ritmo cuando tu mente empieza a dudar.

Es por esto que ahora debo mejorar y estoy haciendo muchas cosas para lograrlo, cambié mi metodología de entrenamiento, cambié mi alimentación, estoy entrenándome psicológicamente, estoy enfrentando miedos para no detenerme y por último empiezo esta bitácora que me permitirá ver que funciona y qué no, que debo repetir y que debo cambiar, la memoria tiene trucos y es mejor tenerlo todo por escrito.

Oscar rumbo al Ironman Cozumel 2013...